
JPM afirmó que inversores institucionales han comenzado una transferencia de riqueza de ETF de Oro a Bitcoin, lo que sugiere una evolución adversa de precios para el metal precioso.
Bitcoin ha tomado una parte importante de la participación de mercado del oro y continuará haciéndolo en el futuro cercano, argumentan los analistas de JPMorgan Chase & Co. Destacaron la diferencia decreciente en los fondos asignados en el metal precioso y la criptomoneda principal, diciendo que la medida «representará la transferencia de miles de millones en efectivo».
La comunidad de las criptomonedas ha debatido durante años sobre la narrativa de que bitcoin es la representación digital del oro. Después de todo, ambos tienen características comunes, como la oferta limitada, y se supone que tienen una función de cobertura o refugio de valor.
Los miembros más optimistas especularon que los grandes inversores institucionales eventualmente se darán cuenta de las superioridades de bitcoin sobre el oro, principalmente su escasez digital, y se alejaran del metal precioso.
Hasta ahora, 2020 ha resultado ser el año con las entradas más sustanciales de dinero institucional en bitcoin. Esto se ejemplifica con los informes trimestrales en constante crecimiento de Grayscale , nombres famosos como Paul Tudor Jones III y Stan Druckenmiller, y gigantes de Wall Street como Guggenheim Partners.
Al mismo tiempo, los ETF de oro han comenzado a registrar salidas notables. Los estrategas cuantitativos de JPM, liderados por Nikolaos Panigirtzoglou, confirmaron este resultado en un informe reciente citado por Bloomberg.
Los analistas dijeron que «el dinero se ha vertido en los fondos de Bitcoin y sin oro desde octubre, una tendencia que solo continuará a largo plazo a medida que más inversores institucionales tomen una posición en las criptomonedas».
Los analistas de JPM afirmaron además que bitcoin representa solo el 0.18% de los activos de la oficina familiar, mientras que los ETF de oro toman alrededor del 3.3%. A pesar de esta todavía gran diferencia entre los porcentajes de los dos activos, Panigirtzoglou cree que la tendencia ha comenzado a cambiar. Este cambio de aguja podría dañar el precio del oro a largo plazo.
“La adopción de bitcoin por parte de inversores institucionales solo ha comenzado, mientras que para el oro, su adopción por parte de inversores institucionales está muy avanzada. Si esta tesis de mediano a largo plazo resulta ser correcta, el precio del oro sufriría un viento en contra estructural en los próximos años».
Sin embargo, los estrategas dijeron que el precio de bitcoin podría haberse «excedido» durante la carrera alcista del cuarto trimestre, cuando el valor del activo casi se duplicó. Ellos predijeron un retroceso a corto plazo al tiempo que indicaron que el metal precioso «debe recuperarse».
José Hernández
Noticiero Bitcoin