
La dificultad de la minería de Bitcoin cruzó un máximo histórico de 35,61 billones de hashes el lunes, a medida que los mineros aumentan sus operaciones o más mineros se unen a la red.
La dificultad de Bitcoin es una función de ajuste automático del protocolo de Bitcoin que determina qué tan difícil es extraer un bloque de Bitcoin. Se implementa para garantizar que las transacciones se procesen a un ritmo constante, que es de 10 minutos.
La dificultad se ajusta cada 2016 bloques de acuerdo con los cambios en la tasa de hash. Según las últimas estimaciones, la dificultad aumentó un 13% para llegar a 35,61 billones, lo que lo convierte en el mayor ajuste al alza en la dificultad de minería en la red de Bitcoin desde mediados de 2021.
El aumento de la dificultad de los bloques dificultará que los mineros compitan en resolver acertijos criptográficos usando chips de hardware especializados llamados Circuitos Integrados de Aplicación Específica (ASIC).
No es solo el nivel de dificultad lo que se ha disparado. La tasa de hash de la red de Bitcoin, otra métrica importante, se encuentra en un máximo histórico de 257 exhashes por segundo (EH/s).
La tasa de hash es la cantidad de poder de cómputo asignado a la cadena de bloques para verificar transacciones y ganar recompensas en bloque. La dificultad de la minería aumenta en respuesta a un aumento en la tasa de hash.