
Venezuela en el último tiempo ha sido una de las regiones con mayores problemáticas en materia de economía, contando con la mayor hiperinflación de todo el mundo, por lo que las criptomonedas han tomado un papel importante en las finanzas del país socialista.
La crisis venezolana empezó a evidenciarse cada vez más desde 2013, pero todo consecuencia de las acciones económicas en años previos que terminaron por destrozar el sector productivo de la nación.
En ese tiempo se atacó incesablemente el comercio privado, lo cual terminó por afectar seriamente la economía, provocando que se desencadenara una imponente devaluación por parte de la moneda local.
Como consecuencia de la inestabilidad de los Bolívares, los venezolanos se han visto obligados por mucho tiempo a buscar otras alternativas que les permitan sortear este difícil escollo.
Pero a esto se suma todas las restricciones y obstáculos que el Gobierno de Venezuela ha impuesto para la obtención de moneda extranjera, obligando a los ciudadanos a recurrir al mercado negro y así conseguir dólares.
Ante esta situación es donde han aparecido las criptomonedas, en especial el Bitcoin, las cuales gracias a sus beneficios y ventajas provenientes de su descentralización, han surgido como un elemento de esperanza en la economía.
Posiblemente de no existir una crisis tan apremiante en la nación sudamericana, los criptoactivos no habrían tenido el impacto tan radical que han logrado hasta la actualidad.
Porque ciertamente de la necesidad de una forma de pago y un método de reserva de dinero, es que el Bitcoin ha cobrado tanta relevancia, sobre todo si analizamos que ofrece la libertad económica que ha sido sercenada por el gobierno venezolano por mucho tiempo.
Un aspecto que también ha influido ha sido la masiva migración de esta población por todo el mundo, los cuales han visto en las monedas virtuales la opción más viable para enviar dinero sin comisión.
Esto afectó enormemente a que la región sea una de las líderes en cuanto a transacciones se refiere, en donde casas de cambio como LocalBitcoin han señalado que Venezuela está entre los países más participativos en esta área.
Por lo que las criptomonedas han representado una pieza clave en la economía de los venezolanos, hasta el punto de que el gobierno de Nicolas Maduro también haya mostrado interés en ellas.
En vista de que las criptodivisas iban incrementando su popularidad gracias a sus múltiples virtudes, el gobierno decidió también adentrarse al mundo cripto, con el evidente objetivo de sacar provecho de todo esto.
Por lo que en 2018 lanzó oficialmente el Petro, una criptomoneda nacionalizada que estaba vinculada al petróleo venezolano y proporcionaba una alternativa aprobada por el Estado.
Pero desde un inició este activo ofrecía más incertidumbres que certeza, en gran parte por contradecir la naturaleza descentralizada que caracterizan a las monedas virtuales.
Al principio se presentó el lanzamiento del activo como una solución para los problemas de los venezolanos, pero inevitablemente fue cayendo en el olvido, a pesar de que el gobierno hizo obligatorio el pago de pasaportes y otros servicios gubernamentales en Petro.
Por otro lado, el resto de las criptomonedas han continuado con su buen desempeño, donde se han ido potenciando e incorporando dentro del comercio venezolano y siendo un elemento mucho más común.